sábado, 21 de agosto de 2010

La importancia del sector terciario en una economía globalizada: potenciando la competitividad de la industria turística en la Región Andina. (II)




En nuestra entrega anterior tratamos la importancia del sector terciario, particularmente de la industria turística como pilar económico y eje de desarrollo para varios países a nivel mundial. Así mismo propusimos para esta segunda parte, abordar aspectos ligados a la competitividad en el sector turismo tomando como referencia el “Reporte de Competitividad del Turismo 2009”[1] por medio del cual analizaremos la oferta turística de cinco naciones andinas[2] comparándolas entre sí a fin de identificar sus puntos fuertes y sus limitaciones en relación a sus industrias turísticas.

A fin de resumir la extensión de nuestro trabajo hemos seleccionado seis pilares[3] -que a nuestro juicio- mejor graficarán lo que deseamos exponer.

La calidad de la oferta turística de un país está supeditada a la solidez de su “producto turístico”. Dicho producto -a fin de ser comercialmente atractivo- deberá contar con ciertos recursos naturales y/o culturales auténticos y/o exclusivos dotándolos de una infraestructura y servicios de calidad en conjunto con una eficiente red de transportes y comunicaciones. Y es que la actual tendencia del rubro es la de garantizar al viajero (interno y externo) una experiencia turística única, pero sobre todo, segura.

Proponemos comenzar nuestro análisis revisando el siguiente gráfico referente a los recursos naturales y culturales existentes en Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador y Perú.

Dentro de los aspectos más saltantes podemos mencionar que Ecuador (36) lidera la clasificación grupal en cantidad de patrimonios naturales de la humanidad. Por su parte, Perú (46) y Colombia (33), destacan en el número de áreas naturales protegidas[4]. En relación a los recursos culturales sobresalen Bolivia (26) y Perú (19), mientras que Chile (37) está a la cabeza en el número de ferias internacionales y promoción turística seguida por Colombia (42).

Por otro lado, gran parte del transporte empleado por los turistas a nivel mundial es la vía aérea, de allí la necesidad de analizar las condiciones de la infraestructura con la que cuentan los países. El siguiente gráfico de telaraña[5] define siete elementos fundamentales a considerar en la clasificación de los destinos turísticos.

Claramente notamos que Chile posee -en promedio- la mejor infraestructura aérea. Bolivia por su parte, evidencia serias limitaciones sobre todo en la calidad de su infraestructura, el número de líneas operando y las redes internacionales de transporte. Procedamos ahora a analizar la infraestructura turística detallada en el grafico siguiente.

Chile (62) destaca por ofrecer el mayor número de cajeros automáticos (los cuales facilitan un mayor consumo por parte del turista). El Perú (54) a su vez, posee el mayor número de habitaciones[6] en comparación al resto de los otros países.

En relación a la competitividad de los precios, podemos apreciar -en el cuadro líneas abajo- que Ecuador (123) presenta un fuerte recargo de impuestos en sus aeropuertos y tickets aéreos y Bolivia (3) destaca ampliamente en materia de precios.

En el plano de recursos humanos -desarrollados en el Pilar N° 11 del reporte- nos percatamos que en cuanto a la calidad del sistema educativo Colombia (63) es el líder (mientras que el Perú penúltimo a nivel mundial). Chile (46) apuesta por un mayor número de centros de investigación escoltado por Colombia (61). Por otra lado, Bolivia (96) se encuentra en última posición en esperanza de vida de su población.

Podemos concluir que la gran dificultad de los países andinos radica en la limitada calidad de su infraestructura aérea y turística y de un bajo nivel educativo. Consideramos que este último elemento es indispensable para la mejora substancial en la calidad percibida por el turista. Un alto nivel de servicio (acompañado de una eficaz capacidad de comunicación)[7]- logró marcar la diferencia en la industria turística de México y República Dominicana por citar a los casos exitosos más emblemáticos.

Finalmente la visión –y ambición- que deberán mantener estas naciones hacia un turismo inclusivo, responsable y sostenible (en sintonía con congruentes reformas[8] y una mejor inversión estatal) permitirán que Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador y Perú logren desarrollar una industria turística competitiva a nivel global.



[1] The Travel & Tourism Competitiveness Report 2009, Foro Económico Mundial (WEF, sus siglas en inglés). Dicho reporte analiza el nivel de competitividad turística mundial (133 países) sustentándose en 14 “pilares” que abarcan aspectos tales como recursos naturales y culturales, infraestructura turística, educación, recursos humanos, competitividad de precios, entre otros. De esta manera establece un ranking descendente donde 1 representa el valor mayor y 133 el valor menor dentro de la escala definida.

[2] Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador y Perú.

[3] Pilar N° 6: Infraestructura Aérea; Pilar N° 8: Infraestructura Turística; Pilar N° 10: Competitividad de Precios en la Industria Turística; Pilar N° 11: Recursos Humanos; Pilar N° 13: Recursos Naturales y Pilar N° 14: Recursos Culturales.

[4] Es necesario destacar la importancia de la Amazonía no sólo como invaluable recurso biológico global sino también como destino turístico ecológico. Recientemente Ecuador declaró la intangibilidad del Yasuní (área natural protegida) renunciando así a los yacimientos petrolíferos avaluados en más de US$ 7,000 millones de dólares, sentando con ello un precedente a nivel mundial.

[5] En el presente caso, cuanto más pegado a los extremos se encuentren los países, menor será la percepción de la calidad de su infraestructura aérea.

[6] Cifras basadas al año 2007.

[7] Tanto México como República Dominicana, a mediados de los años ochenta, invirtieron en la enseñanza del inglés y capacitación en servicio a los pobladores de sus regiones turísticas más importantes.

[8] Bajo la forma de políticas y estrategias orientadas a impulsar el desarrollo de la actividad turística.

Publicado en revista "Chef & Hotel" (Chile):

http://www.chefandhotel.cl/images/Revista41.pdf

2 comentarios:

Camila dijo...

Yo quiero detenerme en el análisis de la infraestructura aerea. Considero muy importante para comenzar cualquier tipo de actividad turística que esta esté garantizada. Es muy dificil lograr cualqueir cosa sin el transporte. Pero este no solamente tiene que existir, sino dar un buen servicio, porque si no la gente tampoco lo utiliza. Hace poco saqué unos pasajes a Playa del Carmen para disfrutar de la playa. Quedé tan contenta con el servicio de comida, de limpieza y de atención del avión que volvería a hacer el viaje por eso. Hay que tener esas cosas en cuenta también!

Sandor G. Lukacs de Pereny dijo...

Hola Camila. Gracias por tu aporte. Claramente la oferta aérea en la región no solo ha aumentado sino que además ha mejorado sus estándares de calidad gracias a la competencia entre las compañías aéreas. Esta calidad forma parte de la "experiencia" turística por cuanto un buen comienzo (ida) y un buen final (retorno) con transporte de calidad, pueden sellar una inolvidable experiencia. Totalmente de acuerdo contigo en temas de infraestructura aérea. Sin embargo, a Latinoamérica le falta aún más descentralizar aeropuertos para que lleguen más turistas a zonas cuyos pobladores ofrecen su gastronomía y entorno como medios sostenibles de vida. Ahí está el reto y la oportunidad. Un cordial saludo para tí y gracias por seguirnos.